En diciembre de 2015 el estudiante chino de biología marina He Jinru publicó en la revista científica Plos One un artículo sobre las sorprendentes propiedades de la medusa Aurelia, capaz de alcanzar la inmortalidad biológica. Según se hacía eco la revista National Geographic, una vez que Aurelia immortal expira, desarrolla la capacidad de regenerar sus células hasta alcanzar la etapa juvenil, como si de un ave Fénix se tratara.
Este descubrimiento científico sirve al escultor, fotógrafo y diseñador Javier Viver para plantear una narración que oscila entre la documentación científica y la ficción. La historia se cuenta desde el año 2046, en un futuro en el que los avances de la biotecnología han permitido desarrollar una especie transhumana, cuya vida se podría prolongar indefinidamente. Visto desde este futuro ficticio, el descubrimiento de las propiedades de la Aurelia plantea muchas cuestiones sobre el ser humano, la naturaleza, el arte y la inmortalidad.
Para componer esta historia, Viver utiliza diversos medios: vídeo, fotografías, dibujos, esculturas, y un fotolibro en el que la secuenciación de imágenes nos permite reconstruir una narración abierta. A lo largo de todo el proyecto se yuxtaponen continuamente el macrocosmos y el microcosmos, la naturaleza y el ser humano, la ciencia y el arte. Así, se combinan las fotografías científicas de las medusas con otras que muestran a los transhumanos del futuro, perfectos y atemporales como esculturas clásicas. Una perspectiva de ficción que alude a nuestra situación actual, cuando se están invirtiendo sumas multimillonarias en investigaciones destinadas a “combatir la muerte”.
+info do autor: javierviver.com